SPI Astilleros realizó la botadura de la Fragata Libertad

La presidenta del astillero marplatense que realizó la puesta en valor de la Fragata Libertad, Sandra Cipolla, destacó que “esta oportunidad histórica pone en valor a la Industria Naval”. Los trabajos fueron realizados de acuerdo a los plazos previstos, siguiendo los Protocolos de Prevención por la pandemia del Covid-19.

En las primeras horas del pasado jueves, los equipos de SPI Astilleros y de la Fragata ARA Libertad comenzaron con la maniobra de botadura de la emblemática embarcación. De esta forma, cerca de la 8 de la mañana, nuestra embajadora de los mares regresaba a navegar.

La Fragata Libertad ingresó al dique flotante Mossdock 2000 del astillero marplatense el jueves 12 de marzo para avanzar con los trabajos que involucraron la puesta en valor del sistema de gobierno y propulsión.

Si bien las tareas debieron detenerse por un tiempo, consecuencia de la emergencia sanitaria por el COVID 19, los mismos pudieron reanudarse al tratarse de una obra pública y, por ende, estar exceptuados del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio. Esto permitió al equipo de SPI desarrollar los trabajos de acuerdo a los plazos previstos, tomando las medidas correspondientes de seguridad y resguardo de la salud, siguiendo los Protocolos de Prevención.
En cuanto al grupo que desarrolló los trabajos, se conformó un equipo integrado por ingenieros, obreros navales, buzos y personal altamente calificado que realizó las tareas de forma articulada con el personal de la Fragata.

Sandra Cipolla, presidenta de SPI Astilleros, destacó que “tener la Fragata Libertad ha sido no solo una gran oportunidad para SPI sino también para toda la comunidad del puerto y de Mar del Plata que ha estado a la altura para prestar los distintos servicios que requirió la puesta en valor. Es un orgullo para todos los marplatenses”.

También subrayó el acompañamiento que recibieron del Comandante de la Fragata y su personal en todo momento, fundamentalmente, cuando tuvieron que reorganizar los trabajos en el contexto de la emergencia sanitaria por el COVID 19, compatibilizando el cuidado de la salud y el desarrollo de las tareas.

Cipolla, además, expresó: “para nuestro equipo, este 20 de abril, Día del Obrero Naval, fue muy especial; haber podido reparar la Fragata es un reconocimiento, una valoración a nuestros obreros navales y a nuestra empresa”.

“Esta oportunidad histórica pone en valor a la Industria Naval; nos permite resaltar el valor de los astilleros privados pera también destacar el potencial de la industria naval pública de nuestro país recordando, por ejemplo, que nuestra embajadora de los mares fue construida en la Argentina en los Astilleros Río Santiago”, concluyó.
Fuente: Serindustria